Andan las casas de subastas atareadas, no salen de su asombro, siglos estudiando los comportamientos humanos para intentar mejorar el arte de su profesión, no exenta de grandes dosis de psicología y aún más de mercadotecnia. Absortas y aprendiendo el verdadero arte del chalaneo al que por desgracia ha evolucionado la comunicación política contemporánea.
Las casas de subastas de Sotherby´s y Christie´s hacen cursos intensivos “on line”, apenas párvulos trileros, en este auténtico Patio de Monipodio en el que se ha convertido la campaña electoral de las municipales y autonómicas del próximo día 28 de mayo.
Y es que bien parece que fueran juegos callejeros de apuestas fraudulentas y consistentes en adivinar cuánto de cierto hay en las promesas e incluso compromisos de los diferentes equipos electorales y partidos políticos.
Alguno no se fía ni de su propia palabra y tiene que acudir a la notaría más próxima para intentar dar una pátina de certeza a sus propias dudas o embustes.
La mayoría de lo tan alegremente prometido caerá en saco roto apenas tomen posesión los agraciados de sus bastones de mando o escaños en la Asamblea. Ello gracias a ese bendito mecanismo de defensa del que nos valemos los humanos, consistente en eliminar de la memoria todo aquello que entendemos como sobrante y no principal ni urgente.
Y es que como ya nos adelantara Groucho Marx, ese sabio filósofo estadounidense de mediados del pasado siglo: “¡Y dos huevos duros!» Así que, si uno nos anuncia una mejora necesaria y evidente en materia social, “ipso facto” el contrario exclama: «¡Y dos huevos duros!» Que cinco días laborales, pues cuatro. Que un piso gratis, pues dos y un chalet en la playa con vistas al mar y así sucesivamente en esta subasta sin fin.
Tan sólo cinco días para la obligada jornada de reflexión y deseosos de poder tener esas horas de tranquilidad para analizar lo escuchado y optar por lo que ahora está en juego, el futuro de nuestra región y de nuestras ciudades y pueblos para los próximos cuatro años y sucesivos.
Sería muy de agradecer que los líderes políticos de las diferentes formaciones se centraran en este objetivo y dejaran de considerarnos lerdos e intentar intoxicarnos con cuestiones que nada tienen que ver con lo que ahora se dirime.
No es momento de peleas ni discusiones pueriles tendentes a avivar los más bajos instintos. Ya son muchas campañas electorales para que unos u otros nos intenten distraer con hábiles movimientos circulares de manos, a derecha e izquierda, para preguntarnos finalmente dónde está la bolita.
Este sábado 27 día de reflexión y el domingo día 28 de mayo los comicios locales y autonómicos. Ese día será la verdadera encuesta electoral. Ese día y gracias a la Constitución serán los ciudadanos los que soberanamente decidan quién es el mejor candidato a alcalde o quién para presidir la Junta de Extremadura.
Todo lo demás son fuegos de artificio o mesas de cartón donde tres tapones ocultan la verdad. La bolita hace tiempo que no está bajo ninguno de ellos, ni siquiera en poder de los trileros ni de sus cómplices, la tenemos los ciudadanos llamados a votar.