Los barones y alcaldes socialistas no saben qué hacer con Pedro Sánchez. El más crítico con sus nefastas políticas es, sin duda, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page que, por cierto, estuvo en Mérida en 2006 siendo alcalde socialista de Toledo y yo de Mérida, y le pedí expresamente su apoyo para que el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad aceptara a la capital extremeña como miembro de dicho grupo. Su apoyo fue decisivo y las ciudades del Grupo gobernadas por el PP y encabezadas por el alcalde de Cáceres, José María Saponi, admitieron a Mérida sin dudarlo.
No hay que olvidar que unos años antes rechazaron la candidatura de Mérida. Yo se lo agradecí entonces a García-Page, y se lo sigo agradeciendo.
El actual presidente de Castilla-La Mancha ha rechazado públicamente las decisiones, tan terribles para España, que está tomando el presidente del Gobierno y sus socios -comunistas, filoetarras e independentistas-.
García-Page ha mostrado su rechazo a que se atenúen las penas a los golpistas enemigos de España, algunos de ellos en prisión con sentencia firme y otros fugados de España cuales ratas cobardes. Page también ha manifestado su opinión contraria a minimizar el delito de malversación, ideado por sus socios de partido, para que cuando se repita el intento de golpe de estado en Cataluña, no puedan ser juzgados y encarcelados, y que quienes ya están en chirona por esos delitos, sean excarcelados prontito.
El caso es que García-Page se ha desmarcado con claridad. Al menos en apariencia. Pero, ¿y su homólogo Fernández Vara? Veamos: Hace unos años criticaba mucho a Pedro Sánchez, incluso no fue, tampoco Osuna, a un mitin suyo en la barriada de Nueva Ciudad.
Pero cómo ha cambiado el cuento.
Aquellos gestos fueron puramente de postureo, ya que poco después se plegaron a los designios del autócrata Sánchez.
Ahora F. Vara no sabe qué hacer. Por un lado, quiere imitar a Page y desmarcarse de Sánchez, pero por otro lado no se atreve. Igual que el resto de varones socialistas. Sólo amagan, porque tienen miedo. Eso sí, en privado dicen estar en contra. Eso tiene un nombre y es el antónimo de valentía.
De todas formas, ya llegarían tarde, porque si se desmarcaran ahora, todo el mundo se percataría de que es por ambicioso electoralismo.
La realidad es que Vara es tan perjudicial para los intereses de Extremadura cómo Sánchez para España. A la vista está tras tres legislaturas totalmente perdidas.
Por su parte, la presidenta del PP extremeño, María Guardiola, puede y debe aprovechar la oportunidad. Extremadura, como Andalucía, son comunidades “muy” españolas. Y sus ciudadanos están locos por votar en contra de Sánchez. La oportunidad la tendremos el 28 de Mayo. Vara versus Guardiola. No hay color.
Pues va ser que sí, que lleva usted razón, pero no porque usted se oponga por ser de distinta ideología como dirán algunos, es que hasta los propios socialistas de toda la vida estamos en contra como ya le hemos hecho saber.
A las pruebas me remito:
https://www.europapress.es/nacional/noticia-exministros-exaltos-cargos-psoe-avisan-cambiar-sedicion-malversacion-estimula-atentar-contra-constitucion-20221212113328.html
https://www.eldebate.com/espana/20221212/exministros-exdiputados-socialistas-unen-manifiesto-contra-beneficios-condenados-proces_79001.html